Los medios de comunicación en los últimos tiempos

Por Alexis Rodríguez 

En el libro de Daniel, Dios profetizó el acelerado movimiento de la gente y el aumento de avances científicos en los últimos tiempos. Todos hemos visto y somos testigos de esta profecía cumplirse ante nuestra mirada. 

Los avances científicos y tecnológicos son instrumentos provistos por Dios para usarlos para la proclamación de las buenas nuevas, para que el Evangelio sea predicado a todo el mundo, para testimonio a todas las naciones. 

Cristo prometió a sus discípulos que cosas mayores que las que Él hizo, haríamos en su nombre. Muchos estudiosos bíblicos aseguran que dentro de estas cosas mayores están el eficiente uso de los medios de comunicación de este tiempo de postmodernidad. 

El uso de las ondas hertzianas, los satélites con sistemas de cables, la fibra óptica, la Internet, las redes sociales son herramientas poderosas a la disposición de todos, incluyendo a los hijos de Dios comprometidos con la predicación del Evangelio a tiempo y fuera de tiempo. 

Aunque muchas personas utilizan estos medios para cosas perniciosas; los hijos de la luz estamos llamados a utilizarlas para dar a conocer las virtudes del Reino de Dios. 

La globalización de la información hace que en un abrir y cerrar de ojos millones de personas tengan acceso a noticias y anuncios de contenidos trascendentes. 

La Iglesia de Cristo es desafiada a echar manos a los medios de comunicación para cumplir con la gran comisión; así como también para contrarrestar los mensajes nocivos de quienes no promueven cosas que agradan a Dios. La cultura "basura" que promueve la postmodernidad, sólo será contrarestada cuando la Iglesia de Jesucristo se apodere y empodere de los medios de comunicación, valorando en su justa dimensión su importancia. 

Es recomendable, que las Iglesias piensen y trabajen enfocados en adquirir medios de comunicación y tener presencia activa en radio, televisión, redes sociales, etc. Las iglesias deben invertir en la preparación de sus miembros en ciencias y tecnologías, para levantar una generación de gente entendidas en los tiempos, para que el nombre de Dios sea glorificado.

Estamos en la era del conocimiento al alcance de todos. El pueblo perece por falta de conocimiento. El conocimiento trae revelación y la revelación trae arrepentimiento. Dios no quiere que ninguno perezca; sino que todos procedan al arrepentimiento.

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