Isidoro Santana aboga por la reforma fiscal y aumento de la presión tributaria en RD
Santana criticó la ineficiencia de los gobiernos en aplicar impuestos sobre las ganancias y la propiedad, destacando que la presión tributaria ha permanecido entre 13% y 15% desde la muerte del dictador Rafael L. Trujillo. Argumentó que con una presión tributaria del 13.5%, es imposible abordar los problemas del país, especialmente si una parte significativa de los ingresos se destina a pagar intereses de la deuda y a la educación.
Santana enfatizó la necesidad de una presión tributaria más alta, citando la Estrategia Nacional de Desarrollo, que recomienda una presión del 21.5%, aunque reconoce que esto es difícil de lograr en el contexto actual.
En cuanto a cómo debería ser la reforma fiscal, Santana sugirió que los impuestos deben ser progresivos, enfocándose en los ingresos y propiedades de los ricos mientras se protege a los pobres. Puso como ejemplo el éxito de los impuestos progresivos en Europa durante la época del estado de bienestar.
Santana también abogó por la eliminación de todas las exoneraciones fiscales, argumentando que mantener algunas abre la puerta a la corrupción y el abuso. Además, expresó su deseo de eliminar el anticipo, una figura tributaria que considera injusta y molesta para los contribuyentes, aunque entiende su propósito de reducir la evasión fiscal.
En cuanto a la evasión, Santana subrayó la necesidad de que el gobierno use medidas coercitivas para enfrentarla, señalando que la elusión y la evasión, aunque diferentes en sus métodos, tienen el mismo objetivo de evitar el pago de impuestos.
La reforma fiscal, según Santana, debe cerrar las brechas legales que permiten la elusión y eliminar todas las exoneraciones para asegurar un sistema tributario más justo y eficiente.
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